Repasa Arenilla Sáez la Administración española y la opinión pública que planea sobre ella. Según él, "el histórico estereotipo social negativo de la Administración española no se refiere solo a su rendimiento sino a la confianza política que los ciudadanos depositan en las instituciones públicas y en sus integrantes."
Y señala como conclusión que "la reforma de la Administración española deberá venir de la mano de una profunda transformación de nuestro sistema político, al que pertenece, no por la importancia de la gestión pública ni de los funcionarios, sino para garantizar su legitimidad y fortalecer nuestra debilitada democracia, que esta crisis pone dolorosamente en evidencia."